No creo que la capacidad de un médico para trabajar en equipo y ser empático dependa de que se haya formado en una universidad privada o publica. La privada tiene a su favor quizá metodologías más novedosas y desde luego lo reducido de sus grupos pero obviamente no es una opción para la mayoría de las familias ni con el mayor de los esfuerzos. En la pública, las cosas también están cambiando y cuenta con muchos medios para las prácticas en su red sanitaria. En nuestro caso pudimos elegir entre ambas y nuestro hijo se decantó por la pública. A día de hoy está muy contento a pesar de la exigencia del grado, como me imagino que también lo hubiese estado en la otra.Las cualidades que tenga como médico cuando llegue a ejercer son un futurible, de momento se está esforzando...