Hola, siento mucho leer que has tenido ese tipo de experiencias en el departamento.
Yo te aconsejaria que pensaras más allá de lo que siempre has querido, y te plantées que es lo que te gusta más ahora. La veterinaria no es una profesión fácil y en todas las ramas hay peligros. Por ponerte un ejemplo yo me dedico a pequeños animales y estoy cubierta de arañazos y cicatrices, una de ellas debida a un mordisco de un gato que se infectó y necesité cirugía a pesar de la atención médica casi inmediata. Con esto no te quiero asustar, simplemente ser realistas porque independientemente de la rama que elijas vas a tener que enfrentarte a tus miedos. Obviamente hay cosas más peligrosas que otras, por ejemplo, las vacas son súper peligrosas y los caballos, debido a su tamaño e impredictibilidad pues más. Lo bueno de esa facultad (o cualquier otra) es que estás rodeado de profesionales increíbles que te pueden enseñar cómo manejar a este tipo de animales, como leerlos y como evitar accidentes en el futuro, pero tienes que ser capaz de acercarte a ellos con respeto pero con seguridad.
Te pongo un ejemplo de mi propia experiencia: mientras trabajaba como veterinaria de urgencias y cuidados intensivos en un hospital en Londres, llegó una perra Rottweiler con distocia. Teniamos que hacerle una cesárea para sacar a los cachorros con vida ya que uno de ellos estaba atascado en el canal de parto. Esta pobre perra estaba muy estresada, con dolor y miedo e intentó morderme. Cuando digo que intentó morderme no me refiero a un mordisco se aviso, sino a que si su dueña no hubiese reaccionado a tiempo ese animal me abria arrancado la cara. Después de eso, obviamente me costaba acercarme a ese animal en particular y básicamente me negué a hacerlo. Eso no significa que ahora me den miedo todos los perros o todos los Rottweilers (son una de mis razas favoritas, por cierto), pero esa perra en particular (Storm, me acuerdo hasta de su nombre) me aterra.
Lo que quiero decir con esto es que no puedes dejar que un incidente en particular te aleje de tu sueño de dedicarte a caballos si es lo que de verdad te gusta, pero te recomendaría hablar de tus miedos con alguno de los profesores para que te ayuden a superarlo. Por otro lado, si crees que no vas a poder, mejor no continúes por esa via ya que los caballos som muy peligrosos y un error con ellos puede ser mucho peor que con un gato de 4kg.
Si por otro lado decides que te quieres dedicar a exóticos entonces habla con Alejandro. Es una maravilla de persona, un profesor increíble y una enciclopedia con patas. Y lo mejor de todo es que es el que más sabe de exóticos en esa facultad. Te recomendaría una charla con él para ver qué opinas. No hay muchos veterinarios de exóticos en general y es una rama preciosa y complicada al mismo tiempo, pero tienes que aprender sobre su manejo primero porque es lo más importante. Con todo eso Alejandro te puede guiar y aydar mucho.
Y si al final decides que pequeños animales, pues ve a por ello, porque es donde más te puedes especializar también (yo tengo un PgC en cirugía de pequeños animales y voy a hacer otro en oftalmología). Una vez que te especialices puedes encontrar trabajo más orientado a lo que te guste más.
Espero haberme explicado bien, pero básicamente quiero transmitir que tu tienes que ser quien haga una reflexión sobre lo que quieres hacer de verdad, qué es lo que te apasiona, y luego hablar con los profesionales que te puedan guiar más. Y en cuanto a "cambiar de vocación" yo diria que todo el mundo lo hace en cierta medida. Yo no sabía si dedicarme a grandes o pequeños porque me encantan los animales de granja, pero en cuanto empecé a descubrir la cirugía me decidí por completo por pequeños animales. Y no me arrepiento en absoluto.
Espero que te ayude y dime si necesitas algo más