José María Vergeles, miembro de la Comisión Técnica Delegada de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud y director general de Gestión del Conocimiento y Calidad Sanitaria de la Junta de Extremadura, ha analizado para ‘Acta Sanitaria’ las últimas novedades sobre el MIR y la Troncalidad, pasando por la nueva oferta de plazas y continuando con el descontento que su inclusión en un tronco común ha generado en los microbiólogos y parasitólogos
Acta Sanitaria. -¿Cómo se ha planteado esta vez la Comisión la próxima oferta de plazas MIR?
José María Vergeles. – Recientemente, mantuvimos una reunión en el Ministerio de Sanidad con las Comunidades Autónomas y se planteó la necesidad de reducir la oferta para ir ajustando el número de egresados en las facultades de Medicina con el de plazas. La nueva convocatoria MIR va a contar con una reducción del 1,44 por ciento respecto a la de este año, aunque estos datos no son todavía definitivos. Esta necesidad se observa a través de diversos estudios de necesidades de Recursos Humanos y por el hecho de que ya hay especialidades excedentarias.
A.S.-¿Cuáles son estas especialidades con excedente?
J.M.V. – Por ejemplo, en el caso de Extremadura, se trata de unas especialidades que vamos a proceder a no ofertar, aunque sigan acreditadas, y que, no obstante, volverán a salir cada dos años, cuando se regule la situación. En todo caso, consiste únicamente en la retirada de una plaza por cada una de estas especialidades, que son, por ejemplo, Neurofisiología, Nefrología, Neumología, Geriatría y Cirugía Pediátrica. En el resto del país se va a hacer lo mismo, circunscribiéndose a las necesidades del ámbito autonómico.
A.S.-¿Cuál es el peligro de seguir incrementando la oferta
J.M.V. – No tiene sentido seguir aumentándola. Existe un agujero muy importante entre los egresados de las facultades y la oferta formativa especializada, lo que genera que queden vacantes en unas especialidades y que otras sean excedentarias. La formación del médico es muy costosa y hay que cuidarla. Para ello es necesario cierto equilibrio. Se está formando a decenas de miles de médicos que en cuatro años podemos correr el riesgo de que tengan dificultades para encontrar trabajo o que el que consigan sea precario.
A.S.-Pero en los últimos tiempos se ha dado una auténtica carrera por abrir nuevas facultades de Medicina…
J.M.V. – Por eso es necesaria la reducción, ver cómo funciona y después realizar un incremento progresivo. Debemos realizar un ejercicio de responsabilidad y contener la oferta de plazas a costa de aquellas especialidades cuya tendencia es el excedente. Por otro lado, el compromiso de los decanos es el de no seguir con el incremento que se estaba dando en los últimos años. Hay que dar el tiempo necesario para ajustar el número que sale al MIR, siendo lo ideal que cada alumno que termine la universidad tenga asegurada su oportunidad en esta prueba.
A.S.-¿Qué sucede con el alto porcentaje de extracomunitarios que accede al MIR?
J.M.V. – Lo ocurrido este año no se va a producir en la próxima oferta y el número de extracomunitarios va a ser menor en esa adjudicación de plazas, dado que se ha mejorado la interpretación de la Ley de Extranjería en el aspecto de los permisos de estudios, que es lo que había facilitado este incremento. No obstante, en cierto modo, el aumento de médicos extranjeros en el último MIR ha permitido que no queden vacantes. Dado que es un MIR redistributivo y no se aprueba o se suspende, en ningún caso se ha producido un desplazamiento de los aspirantes españoles. Muchos de ellos han decidido no coger plaza o no se han presentado a la elegida.
A.S.-La semana pasada se reunieron para hablar de la Troncalidad, ¿hay alguna novedad?
J.M.V. – Seguimos trabajando en el Borrador del Real Decreto, donde es un acierto que no sólo se hable de Troncalidad, sino también de otros elementos importantes que permiten una imagen de conjunto, como son las áreas de capacitación específicas y la re-especialización, todavía sin desarrollo normativo. Primero vamos a trabajar en un primer articulado y después se abordará técnicamente cómo quedará el mapa de especialidades. Es lo que más va a impactar desde que se creó el sistema MIR, por lo que las prisas no deben estropearlo.
A.S.- Si no cambian algunas cosas los microbiólogos y parasitólogos han anunciado que dejarán de formar a residentes. ¿Qué le parece?
J.M.V. – El mapa ha estado permanentemente abierto, con la posibilidad de modificaciones. Además, este tipo de debate ha tenido dos oportunidades, en su aprobación en el Pleno de la Comisión de Recursos Humanos y en el seno de la reunión del Consejo Nacional de Especialidades en Ciencias de la Salud, y en ningún caso se indicó una salida del tronco de Laboratorio y Diagnóstico Clínico por parte de Microbiología. No debe primar el debate corporativista, si no el técnico, por lo que, amenazar con la formación de los futuros especialistas está fuera de toda razón. Respeto su opinión pero las amenazas son desacertadas cuando no se ha cerrado la aportación técnica. Además, esto produce una debilidad peligrosa para la propia especialidad.