La Dirección General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, liderada por Javier Castrodeza, ha contemplado la mayoría de las alegaciones realizadas al último borrador del proyecto de troncalidad que apareció en julio del año pasado. Así se lo ha comentado Castrodeza en una reunión al presidente del Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), Federico Pérez, quien ha mostrado a Redacción Médica su satisfacción porque finalmente la elección de especialidad se realizará tras los dos años de formación común, a nivel nacional y sin que sea necesario un segundo examen.
En la primera reunión de Federico Pérez como presidente del CEEM con la Dirección General de Ordenación Profesional se han tratado varios temas decisivos para la formación de los futuros médicos. En cuanto a la reforma del modelo de formación sanitaria especializada al que se refiere el proyecto de troncalidad, el Ministerio de Sanidad ha decidido cambiar el momento de la elección con respecto al anterior borrador del proyecto.
Si en un primer momento, el Ministerio contemplaba que sería logísticamente muy complicado establecer una segunda fase de elección tras los dos primeros años comunes de formación y que esa elección de especialidad se realizara a nivel nacional con el único criterio de la prueba MIR, ahora ha decidido incluir esta reivindicación de los estudiantes en el próximo texto. Federico Pérez recuerda que esta era la primera opción propuesta por el CEEM y que el Ministerio veía inviable, por lo que el Consejo estableció una alternativa, que se eligiera tronco, unidad docente y especialidad al principio.
Según los estudiantes, también se ha conseguido que la evaluación final del periodo troncal se establezca únicamente en apto o no apto y que no haya ningún tipo de examen.
Examen MIR, registro de profesionales y recortes
En la reunión, en la que también han estado presentes el subdirector de Ordenación Profesional, Juan Antonio López Blanco, y el ex presidente del CEEM, Íñigo Noriega, los estudiantes han mostrado su preocupación porque la política de recortes suponga un descenso en las plazas MIR en la próxima convocatoria. Sin embargo, se ha garantizado que el número de plazas se va a mantener para el año que viene. El CEEM también ha planteado que se pudiera hacer el examen en gallego, euskera y catalán, algo que el Ministerio ve “muy complicado” de llevar a cabo.
En cuanto al registro de profesionales, una de las reivindicaciones históricas del CEEM, el director general ha asegurado que podría estar funcionando en seis meses. Los estudiantes han pedido que el primer paso tras crear este registro fuera realizar un estudio demográfico para conocer cuántos estudiantes se necesitan y ajustar los numerus clausus. Y en este sentido, han recibido el apoyo del director general.
Finalmente, se ha tratado el tema de los recortes. Los estudiantes han mostrado su preocupación porque estos ajustes supongan un cambio en la filosofía del Sistema Nacional de Salud y que se suprima su universalidad, por ejemplo, en relación a la retirada de asistencia a los inmigrantes. “El médico no solo se regula por las leyes del Estado sino por el código deontológico, y dice que hay que asistir a todo el mundo independientemente de raza o condición social; sin embargo, se está poniendo a los médicos en una situación bastante complicada”, afirma el presidente del CEEM.
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