Primero es una gran diferencia con respecto a bachillerato. Vienes de sacar notazas casi sin dedicarle demasiado tiempo y de repente tienes que centrarte y estudiar al día y las notas se resienten, especialmente si pretendes seguir la metodología de estudio que tenías en bachillerato (no digo que sea tu caso, pero es algo que pasa en general).
Además, el coronavirus nos ha trastocado a todos y sí, aunque en realidad hayamos tenido más tiempo para estudiar, el estar encerrados en casa no ayuda, sobre todo a las personas que no son capaces de estudiar en casa y que necesitan ir a una biblioteca. La nevera está muy cerca, la familia está en casa, te sientes mal por no "socializar" con ellos y las temperaturas de junio nunca han ayudado a estudiar (cosa que pasa todos los años, no solo este).
La buena noticia es que este golpe de realidad que te da primero te despierta y te centras más en segundo. Las notas vuelven a subir y la dificultad parece bajar... Pero no te duermas, porque en tercero empiezan las asignaturas clínicas, lo cual es genial porque POR FIN estás estudiando lo que tu querías y no cosas a las que difícilmente ves la utilidad (bioquímica por ejemplo), pero a la vez, los apuntes son cada vez de mayor tamaño y la necesidad de estudiar más al día se nota más.
En resumen, que las notas bajen en primero y hasta que suspendas algunas asignaturas es completamente normal, porque no estás acostumbrado a la forma de estudiar en la universidad, pero no te rindas, que todos hemos pasado por eso y se supera. Empieza a estudiar un poquito al día, un par de horas al día durante el curso deberían ser suficientes para que tengas una base lo suficientemente sólida para que llegada la época de exámenes te puedas permitir salir con tus amigos de vez en cuando (no todos los días eh?) o no estudiar un día para pasarlo con tu familia y amigos.
Mucha suerte y ánimo!
No te asustes, que no es tan malo como lo pintamos. De hecho, en un par de años, si le preguntamos a
@srtox245187 si considera que primero es un curso difícil, él va a ser el primero en admitir que no era tan difícil como en su momento le parecía.
Yo estoy en 5º, a punto de empezar mis últimos exámenes finales y he pasado por la fase de "esto es muy difícil" y "no se si voy a superar esto" prácticamente todos los años (excepto segundo) pero aquí estoy, a un par de semanas de acabar los exámenes por fin, y si miro atrás, puedo reconocer que los exámenes no eran tan difíciles y que en realidad la dificultad eran las barreras mentales que me ponía yo misma por mi inseguridad.
Todos fallamos, todos tenemos un curso difícil o suspendemos alguna asignatura, pero no podemos dejar que eso nos desanime y tenemos que ver que la meta está cada vez más cerca.
Mucho ánimo para tu hija.
