Nota .- La tabla está ordenada por la columna de las mayores diferencias entre el primer corte y el último del año pasado.
Adenda a la tabla.- El denominado Sistema, conjunto de distritos que funcionan como tales y subconjunto de facultades de los mismos y/o facultades que van a su bola aún estando teóricamente dentro de un distrito universitario, no comparten ni una preinscripción única ordenada de forma prevalente ni una base de datos única que precase la demanda de forma prevalente con la oferta, y que se confirmase con la primera matriculación en julio, dejando los restos derivados de las bajas causadas por las razones que fueran para una segunda fase en la primera quincena de septiembre y que finalizase el proceso. Ante esa ausencia los interesados se ven obligados a formalizar múltiples inscripciones a lo largo y ancho del Sistema. En eso consiste del denominado proceso de multiinscripción. Su purga o casamiento consiste en ir dejando que cada interesado elija su facultad preferente en el primer corte si lo consigue, lo que dará lugar a una baja en todas y cada una de las opciones abandonadas. Bajas que no purgan de forma inmediata prolongando el proceso en cada corte hasta que se agota allá por diciembre. ¿Tiene sensores el Sistema?
Sí, tiene sensores, son sus estadísticos. ¿Qué estadísticos?
Ante la ausencia de unos listados únicos que determinarían la verdadera demanda desnuda de multiinscripción, en la tabla están trabajados los estadísticos de los primeros cortes del Sistema de y de los últimos para ver si ello nos arroja luces, es decir, sensores que nos puedan aportar conocimiento.
Los estadísticos calculados están el zócalo de la tabla, y son: La primera nota o más alta del Sistema, que es mera curiosidad, el percentil 75 que nos ofrece la nota que deja al 25 % de los mejores cortes del conjunto de multiinscritos para arriba y al 75 % para abajo, la media aritmética y la mediana, su diferencia ya es un sensor de la simetría de la campana de distribución. Si es mayor la mediana que la media nos estaría indicando que la campana no es simétrica en sus dos mitades estando algo más más escorada hacia la cabeza que hacia la cola y al revés. Por último tenemos el percentil 25 que nos indica la nota que deja al 75 % de las notas más altas por encima y al 25 % de las notas más bajas por debajo. Entendiendo que siempre hablamos de los cortes publicados por las facultades tanto de los primeros como de los últimos. ¿Qué vamos buscando con esto?
Patrones de comportamiento como única guía en un camino oscuro por la ausencia esa base de datos única que realizara un prepurga en el mes de julio.
Pues bien, a lo largo del proceso, la desviación típica se irá alejando de la primera en cada corte o llamamiento, ese alojamiento tenderá a confluir al final del Sistema una vez haya purgado la multiinscripción y cada mochuelo esté en su olivo de mayor preferencia dentro de los que haya podido y querido optar en su viaje iniciático hacia su ilusión. Para los que se matriculen en el mes de julio en su opción preferente, una buena parte de la demanda, el viaje se termina pronto y ellos y sus familias podrán disfrutar de vacaciones. Son aquellos que están por encima del P75 y una buena parte de los que están por encima del P50 o mediana. Para los que andan entre el P25 y el P50, se entiende siempre entre las notas de su facultad de mejor opción, tendrán que armarse de paciencia a lo largo del verano hasta las purgas de septiembre. Los que se muevan en arenas movedizas, tanto más cuanto más cerca anden del intervalo existente entre l el P25 y el denominado suelo del Sistema (última nota de corte en el mismo). Para estos la paciencia deberá de ser infinita y deberían de tener planes B y C en la mochila de viaje.
Saludos