Neurocirugía, cardiología, cirugía plástica, cirugía cardiovascular, dermatología… Todas especialidades de alta complejidad, algo que no parece asustar a los jóvenes licenciados en Medicina. Y es que las preferencias de los futuros médicos siguen mirando a estas ramas en el momento de la adjudicación de plazas MIR (médico interno residente).
Esta semana se incorporan a sus nuevos puestos de trabajo los 6.349 profesionales que ganaron las plazas de formación en el Sistema Nacional de Salud, cifra un 5% menor que el pasado año. Previamente, a mediados de abril, se presentaron 9.182 candidatos al examen MIR, de los que casi 3.000 se quedaron finalmente sin plaza para alguna especialidad.
El número uno tras los exámenes eligió cardiología en el Hospital de La Paz (Madrid), la misma especialidad que el segundo aspirante, que prefirió el también madrileño Gregorio Marañón. Detrás llegaron oncología médica (en el Ramón y Cajal de Madrid), medicina interna (12 de Octubre de Madrid), cardiología (Puerta de Hierro de Madrid), cirugía plástica (en el Universitario de La Coruña), cirugía plástica (La Paz), aparato digestivo (Ramón y Cajal) y cardiología (Complejo Hospitalario de Navarra).
Las primeras especialidades en agotarse tras las peticiones de los profesionales fueron, por este orden, cirugía plástica (que contaba con solo 33 plazas en total), dermatología (77 plazas), neurología (87), cardiología (153) y cirugía cardiovascular (22). Entre los 10 primeros aprobados, 4 eligieron cardiología. Y entre los 100 primeros, 25 apostaron por esa especialidad. Detrás, cirugía plástica, con 11, y neurología, con 8, según un informe del Sindicato Médico Andaluz (SMA).
En el lado contrario, las residencias que se comenzaron a adjudicar más tarde fueron bioquímica clínica (la cenicienta, con la primera petición con el número 5.158), análisis clínicos (4.494), hidrología (3.775), medicina educación física (3.642), medicina legal y forense (3.256) y medicina nuclear (2.822).
Medicina familiar y comunitaria es siempre la opción con más plazas disponibles. Para este año se ofertaron 1.775 vacantes (el 28% del total), aunque menos de las 1.860 de 2011. “Es la base de nuestro sistema sanitario por el número de profesionales y por la actividad que desarrolla. Y es la especializada que garantiza la equidad y el acceso a la salud hasta en el hogar más alejado. Sin embargo, año a año no es de las más elegidas entre los aspirantes con mejor número”, se reflexionaba en un comunicado de este sindicato médico.
El primer facultativo que prefirió la atención primaria tenía el número 51 de orden y fue el único entre los 100 primeros en decantarse por convertirse en médico de cabecera.
Las mujeres copan un año más la lista de aspirantes, con un 66,7% de las plazas. Entre los 10 primeros, 7 eran facultativas y 14 entre los 25 primeros, aunque el porcentaje se iguala entre los 100 primeros casos. Las especialidades más feminizadas fueron obstetricia y ginecología (el 87,4% de los afortunados con el acceso eran mujeres), cirugía pediátrica (87%), pediatría (85,9%), neurofisiología clínica (75%) y neumología (74,3%). En el lado contrario, las más masculinizadas eran cirugía plástica (solo el 30,3% de mujeres), cirugía ortopédica y traumatología (42,7%), cirugía oral y maxilofacial (42,9%) y neurocirugía (con un casi igualitario 46,2%).
Respecto al lugar elegido para ejercer, las preferencias se las llevan las provincias y los hospitales grandes, donde más plazas se ofertan pero también con más variedad de áreas. Entre los 1.000 futuros residentes que eligieron primero, solicitaron en más número al Hospital 12 de Octubre, La Paz, Gregorio Marañón, La Fe de Valencia, Vall d’Hebrón, Ramón y Cajal, Clínic de Barcelona o Cruces de Bilbao. Pero en algunos pequeños fue difícil encontrar sitio, por ejemplo, el Infantil Niño Jesús de la capital o el Sant Joan de Barcelona.