El 6 de febrero se celebra el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina.
La mutilación genital femenina (MGF) comprende todos los procedimientos consistentes en la resección parcial o total de los genitales externos femeninos, así como otras lesiones de los órganos genitales femeninos por motivos no médicos.
La MGF es reconocida internacionalmente como una violación de los derechos humanos de las mujeres y niñas.
Estos procedimientos no aportan ningún beneficio a la salud de las mujeres y niñas. En la mayor parte de los casos, la MGF es realizada por circuncisores tradicionales que suelen tener otras funciones importantes en sus comunidades, tales como la asistencia al parto.
En diciembre de 2012 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución relativa a la eliminación de la mutilación genital femenina y proclamar este Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina.
Índice de contenidos
Tipos de MGF
La mutilación genital femenina se clasifica en cuatro tipos principales:
- Tipo 1: resección parcial o total del glande del clítoris (la parte externa y visible del clítoris, que es la parte sensible de los genitales femeninos) y/o del prepucio/capuchón del clítoris (pliegue de piel que rodea el glande del clítoris).
- Tipo 2: resección parcial o total del glande del clítoris y los labios menores (pliegues internos de la vulva), con o sin escisión de los labios mayores (pliegues cutáneos externos de la vulva).
- Tipo 3: denominado a menudo infibulación; estrechamiento de la abertura vaginal, que se sella procediendo a cortar y recolocar los labios menores o mayores, a veces cosiéndolos, con o sin resección del prepucio/capuchón del clítoris y el glande del clítoris (tipo 1).
- Tipo 4: todos los demás procedimientos lesivos de los genitales femeninos con fines no médicos, tales como la punción, perforación, incisión, raspado o cauterización de la zona genital.
¿Beneficios para la salud? Ninguno. ¡Solo daños!
Las complicaciones inmediatas pueden incluir:
- dolor intenso;
- hemorragia;
- inflamación de los tejidos genitales;
- fiebre;
- infecciones como el tétanos;
- problemas urinarios;
- lesiones de los tejidos genitales vecinos;
- estado de choque;
- muerte.
Las consecuencias a largo plazo pueden ser:
- infecciones urinarias (micción dolorosa, infecciones del tracto urinario);
- problemas vaginales (leucorrea, prurito, vaginosis bacteriana y otras infecciones);
- problemas menstruales (menstruaciones dolorosas, tránsito difícil de la sangre menstrual, etc.);
- tejido y queloide cicatriciales;
- problemas sexuales (coito doloroso, menor satisfacción, etc.);
- mayor riesgo de complicaciones en el parto (parto difícil, hemorragia, cesárea, necesidad de reanimación del bebé, etc.) y de mortalidad neonatal;
- necesidad de nuevas intervenciones quirúrgicas, por ejemplo cuando después de haber sellado o estrechado la abertura vaginal (tipo 3) hay que practicar un corte para ensanchar la abertura y hacer posible el coito y el parto (desinfibulación); en ocasiones la zona genital es cosida repetidas veces, incluso después de que la mujer dé a luz, con lo que esta se ve sometida a aperturas y cierres sucesivos, cosa que acrecienta los riesgos tanto inmediatos como a largo plazo;
- trastornos psicológicos (depresión, ansiedad, trastorno de estrés postraumático, escasa autoestima, etc.).
Fuente y mas información:
- Female Genital Mutilation/Cutting: A Global Concern UNICEF, Nueva York, 2016.
- Mutilación genital femenina